A mí ya me habían hablado de esta panadería como algofuera de lo normal en cuanto a decoración y efectivamente, cuando pasé por delante, en la calle Don Ramón de la Cruz, enseguida la reconocí. En primer lugar porque desde fuera los carteles y la decoración de arbolitos de laurel llama la atención. Y el escaparate… ¡es una maravilla!. Lo podéis ver en las fotos. Luego entras y está todo decorado con telas rosa palo, los panes están puestos en cestas, las mermeladas en un estante ideal, en definitiva, todo de magnífico gusto.
Aparte de la decoración quise probar el pan, la pastelería y la bollería. Destacaría la bollería pequeñita, como para merienda, y es que en las panaderías no es habitual encontrarla, todo es mastodóntico como para hambre de adolescentes a la salida del colegio… Y especialmente aquí los croissants deliciosos (que salvo honrosas excepciones en España por lo general suelen ser blandurrios y chiclosos).
También la tarta de queso es deliciosa y está cobrando fama. Y también puedes encontrar pequeñas delicatesen como miel, mermeladas y algo que a mí me encanta, y eso que no soy nada dulcera, las auténticas yemas de Santa Teresa, en esas cajitas que traen impreso un jeroglífico en la cajita.
Otra buenísima idea es que tienen un espacio pequeñito para que te puedas tomar un café o un té junto con lo que te hayas comprado. Como digo, el espacio es muy agradable.
El trato y el horario amplio: de 9 a 21h.
Por Bárbara Cárdenas
CAMPOS de RETANA
Don Ramón de la Cruz, 40 (entre Castelló y Núñez de Balboa)
28001 Madrid.
Tel 91 577 79 37
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